¿Acaso el sueño no es el testimonio del ser perdido, de un ser que se pierde, de un ser que huye de nuestro ser, incluso si podemos repetirlo, volver a encontrarlo en su extraña transformación?
Como estamos en época navideña, os dejo este dibujo que he hecho hace un par de días. Para que no olvidemos que el mejor presente (valga la redundancia) es nuestro presente. Sed felices en gerundio, es decir: hoy.